martes, 8 de mayo de 2012

Escriturarte 2. Qué hace interesante a un personaje


Qué gran pregunta. Si hay un escritor que declare que jamás se ha planteado esto o que no forma parte de sus obsesiones recurrentes, miente o en realidad no escribe. Un personaje vivo arrastra consigo la narración, por muchos fallos que acumule, al igual que un personaje muerto contamina del hedor de la muerte la trama más bella, mejor trabada.

¿Cómo se le da vida a un personaje?. Hay miles de recetas al respecto, unas más razonables que otras, entre ellas, aquella que nos pide que recreemos toda su existencia para darle coherencia y buscar aquellos puntos fuertes que lo hagan más atractivo al público. Pero, ¿garantiza eso que nuestro personaje cobrará vida al asomarse a nuestra historia?

Para nuestra desgracia, en este trabajo nada viene con garantías, como si en vez de sentados ante el ordenador nos dedicáramos a parir hijos improbables e impredecibles. Uno puede haber cumplido todo lo que digan los infinitos libros escritos sobre el arte de la escritura y aún así parir hijos muertos.



Sin embargo, hay ciertas normas que ayudarán a que nuestros personajes sean capaces de transmitir humanidad pese a, básicamente, no-ser:

 -Jamás deben ser enteramente racionales, ni todos sus comportamientos perfectamente predecibles. Ningún ser humano es así y deben imitarlos.

-No deben ser el vehículo de nuestros miedos, deseos, ambiciones, ansiedades, insatisfacciones, ni de nuestro deseo de salvar/condenar al mundo. Si un personaje tiene una utilidad, estará muerto. Debe cumplir una función narrativa, pero trascenderla, ser más que eso, debe ser un producto sincero de la creación, del impulso intenso e irrefrenable de crear a un ser no-vivo.

-Deben mostrar sus conflictos; no hay ser vivo que no los tenga. Los animales buscan comida, un alimento que les esquiva, las bacterias invaden tejidos sanos muriendo por el camino, los seres humanos buscan ser felices, una felicidad que nos rehuye, que se nos niega por defecto y que debemos conquistar al precio que sea.

-Deben ser más fieles a sí mismos que a la historia que pretendamos contar. Si plegamos a nuestros personajes al molde la trama de la novela, como si se tratara del lecho de Procusto, morirán desangrados, privados de la escasa vida que hayamos podido insuflarles.

-Debemos amarlos tal como son, como si fueran nuestros hijos; quererlos a todos por igual y poner el mismo empeño en su creación que pondríamos en la educación de cada uno de nuestros hijos.

En definitiva, pese a ser nuestros, no tenemos derecho de vida y muerte sobre ellos. Pertenecen al lector, cobrarán vida en el acto íntimo de la lectura, cuando nuestros interlocutores los reciban de nuestras manos para juzgarlos como hará la vida con nuestros hijos, sin que nosotros podamos protegerlos ni impedir su condena.

viernes, 4 de mayo de 2012

Escriturarte 1. Porque los sueños, sueños son




La literatura se construye con el mismo material que nuestros sueños. Como es un producto de nuestra psique, se contamina de todo lo que ella contiene; se contamina, o podríamos decir también que se enriquece. Pero todo discurre en el ámbito intransferible de nuestro yo, lo cual quiere decir que nuestras historias y nuestros personajes tendrán el tamaño de nuestro propio interior. Serán tan grandes o tan pequeños como nuestro dolor o nuestros miedos. Tan intensos como nuestra capacidad de amar u odiar.

Pero las cosas no son tan sencillas, porque parte de nuestro interior permanece plegado o retorcido en lo más profundo de nuestro cerebro donde, a veces, podemos encontrar verdaderos yacimientos de sentimientos o pedreras de ideas, esas que siempre nos sorprenden o nos asaltan con veradera ferocidad cuando creamos una historia. De ahí, un gris funcionario de oficinas puede sacar el alma sin piedad de un guerrero, o un borracho, la lucidez que le permita analizar sin fallos la realidad. Somos mucho más de lo que sabemos y de lo que los demás saben.

Allá en los concheros de la memoria, el mar de nuestras vidas arroja los cadáveres que cobrarán vida conjurados por la magia de la creación.

martes, 1 de mayo de 2012

Escriturarte


El proceso de la escritura, como todos los creativos, ha sido analizado hasta la saciedad para intentar acertar con sus claves. Pero no las hay. La creación es un flujo continuo, inestable, peligroso, al que resulta imposible embutir en unas leyes racionales. No puede haber racionalidad en las calderas profundas de nuestro intelecto, donde se cuecen las ideas, las sensaciones, los impulsos, el excipiente en pleno hervor de nuestros deseos y nuestros miedos.

Sin embargo, los humanos perseveramos en el intento. Queremos encontrar la fórmula magistral que nos permita fabricar arte, sea en la modalidad que sea, escultura, pintura o literatura. Como no cejaremos jamás en el empeño, es un absurdo pretender escribir y no confesar alguna veleidad teórica al respecto. Aunque no haya fórmulas magistrales, sí tenemos pequeñas recetas de la abuela que transmitir a los que también aflige el deseo de crear.

Por eso, escrituremosnos con el material que tengamos a mano, pese a estar tejido con la evanescente materia de los sueños.


jueves, 13 de enero de 2011

I Encuentro "Yo leo RA"

Me han invitado a participar junto a Olivia Ardey en la mesa sobre romance histórico en los I encuentros "Yo leo RA" que tendrán lugar el 12 de febrero en San Sebastián de los Reyes.

Seguro que lo pasaremos muy bien, desde aquí os invito a que podamos vernos en el encuentro, intercambiar opiniones, echar unas risas y disfrutar de vernos un día mágico.

Allí nos vemos, chicas ;-)

http://www.yoleora.com/2011/01/i-encuentro-ra_13.html

viernes, 10 de diciembre de 2010

Crítica a "Después de ti, nadie"

Buceando por la red he encontrado esta crítica a mi novela, os la dejo para que le echési una ojeada si os parece bien.

http://cuatroamigosmcdolmar.blogspot.com/2010/12/despues-de-ti-nadie-m-j-sanchez.html

Gracias a la reseñadora, y tendré en cuenta su opinión, me ha parecido muy reflexionado lo que expone. ;-)

viernes, 29 de octubre de 2010

"Después de ti,nadie" en el Club de Lectura de la Biblioteca de Pozoblanco

El martes pasado, día 26 de octubre, tuvo lugar la conmemoración del Día de la Biblioteca en la de Pozoblanco,  acto al cual me invitaron. El acto consistió en la presentación de un nuevo curso del Club de Lectura, ya que entre los libros a leer este año se encuentra "Después de ti, nadie".


Acudió una gran cantidad de personas, muchas señoras sobre todo, y estuvimos charlando sobre novela romántica, cuadros desaparecidos, vampiros que no lo son tanto, la inmortalidad y el marqués de Salamanca. La presentación corrió a cargo de Asunción, la concejala de la Biblioteca y nos acompañaron María Angélica y Rafi, nuestras sufridas y encantadoras bibliotecarias. Aprovecho para enviarles desde aquí a las tres un fuerte abrazo y mi agradecimiento por haber contado conmigo. Para mí fue muy emocionante y me alegro mucho de haber compartido estos momentos con mis conciudadanos pozoalbenses. Espero que disfruten de la lectura del libro y pronto podamos reunirnos para intercambiar ideas y comentarios sobre el texto.